Equilibra tu mente, equilibra tu Startup

Por Publicado en: 20 de mayo de 20160 Comentarios

El sentimiento de culpabilidad es uno de los temas más sensibles al llevar a cabo un proyecto. El emprendedor tiene que tener claro todo lo que rodea a su negocio, lo que depende de él y los riesgos que está dispuesto a asumir al tomar cada decisión.

Una decisión puede no resultar como esperado por diversas razones; lo que ocurre es que, si comprende todas las variables que rodean al proyecto, tiene claro todos los agentes involucrados y lo que se juega cada uno de ellos, tendrá claro hasta qué punto llega su responsabilidad al tomar la decisión. Lo que jamás se puede perdonar un emprendedor es tomar una mala decisión por no comprender el riesgo que depende de uno mismo; esto deriva en sentimiento de culpabilidad y conlleva indecisión en siguientes iniciativas, provocando una tendencia decadente en cuanto a motivación, control del proyecto y confianza entre los compañeros de equipo. Fracaso.

Como dice el agente de bolsa y Business Angel Jose Antonio Madrigal, controla tus riesgos y mantente sereno en caso de que falle cualquier factor que no dependa de ti. Libera tu mente.

Pasar tiempo con los seres queridos no es perder el tiempo, es oxigenar tu cerebro. Y es necesario. A menudo escuchamos historias de grandes emprendedores que han cambiado el mundo trabajando 20 horas diarias en su proyecto, obsesionados con que todo lo demás es tiempo malgastado. No te confundas, solo hay dos claves: equilibrio y foco.

Conseguir administrar el esfuerzo de tal manera que, nuestro proyecto esté organizado y atendamos todo lo importante externo al trabajo, es uno de los retos más importantes a los que se tendrá que enfrentar un emprendedor. No es tarea fácil, ya que las preocupaciones aparecerán hasta en sueños; pero, si lo consigues, obtendrás una mayor eficiencia en cada ámbito de tu vida. Y lo que es más importante; serás feliz. Suena muy bonito, pero tenlo en cuenta en cada decisión que tomes en la vida, no solo en tu proyecto: no hagas nada que no te haga feliz.

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